Los peatones que se encuentran cruzando por un paso de cebra no regulado por semáforo tienen plena preferencia, y los vehículos deben detenerse y para permitirles el paso.

Los atropellos en ciudad son habituales, y los conductores saben que el peatón es el usuario más desprotegido y vulnerable de la vía. Para su protección, el Reglamento de Circulación establece una serie de normas que deben cumplir tanto los conductores de vehículos, como los peatones.

En el caso de pasos de cebra, o pasos de peatones, los hay regulados por semáforo, y sin semáforo. En el primer caso el semáforo regulará cuándo pueden circular unos y otros, y en el segundo caso, siempre será preferente el paso de peatones, obligando a los conductores de vehículos a detenerse obligatoriamente para cederles el paso.

En este caso, nuestra clienta fue atropellada cuando estaba cruzando un paso de cebra no regulado por semáforo. La peatona estaba a punto de llegar al otro lado del paso de peatones, cuando una moto, que no respetó su preferencia, le golpeó y provocó que cayera a la calzada.

El atropello le causó lesiones en el tobillo, que obligó a nuestra clienta a permanecer un tiempo en situación de baja laboral y tratamiento médico rehabilitador. Tras alcanzar el alta, la abogada encargada del asunto, dirigió la reclamación frente a la aseguradora de la motocicleta, y consiguió alcanzar un acuerdo satisfactorio para la clienta.

Defensa Jurídica: Luisa Blanco Delgado, Abogada de Servicios Jurídicos Verdún.

Ámbito del caso: Civil. Especialidad: tráfico